La Iglesia católica tiene en este día una fiesta que se llama la fiesta de todos los santos. Son todos aquellos hombres y mujeres que vivieron en el pasado, entre los que hay que contar a nuestros padres, a nuestros abuelos, todo el que hace parte de nuestras familias que triunfaron y están en el cielo. Es una fiesta que nos enseña que nuestros antepasados, los que vinieron antes que nosotros, están presentes y están vivos: es una fiesta hermosísima.
Fiesta de todos los santos, fiesta de todas las personas buenas que han pasado por el mundo y que debemos recordar. Por eso es fiesta de nuestros antepasados, para valorar lo que ellos hicieron, para valorar sus hechos buenos, y si recordamos los hechos malos, es para superarlos, para seguir avanzando. Los antepasados nos hablan del pasado y nos invitan a corregir el presente -si hay que hacerlo-, a seguir sus ejemplos y a avanzar hacia un futuro mejor. Fiesta de los antepasados, la fiesta del primero de noviembre de cada año.
Hasta mañana, si Dios, usted y yo lo queremos.
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