Los Dominicanos, dicen ser personas muy creyentes en Dios, y se auto denominan cristianos, por el simple hecho de haber nacido en este país.
La Biblia afirma, que cristiano es aquel que ha aceptado a Cristo como su salvador y hace la voluntad de Dios, precisamente en el libro de los Hechos es que aparece la palabra cristianos por primera vez, cuando a los Discípulos de Cristo los nombraron como tal, en virtud de que ellos estaban haciendo cosas que el Señor le había encomendado, antes de ir a la diestra de Dios Padre.
El que hace la voluntad de Dios, anda como el anduvo, y no practica actos pecaminosos, ni mucho menos da honras a otras personas, idolatrándolas como dioses, sino a Cristo, que fue Él quien se entrego por nosotros en la cruz.
La verdad es, que nada me daría tanto gusto que los dominicanos sean realmente temerosos de Dios, y Discípulos de Cristo, pues esto nos garantizaría un país libre de pecados, y de tanto actos de violencias, como los que han sucedido en los últimos años.
Actos que han llevado a las autoridades a implementar distintos planes con el objetivo de contrarrestar la delincuencia y la violencia, en sus distintas manifestaciones.
Sabemos, de medida como la de reducir el horario de establecimientos destinados a la diversión y a la venta de bebidas alcohólicas.
Esta medida y otras no menos importantes fueron tomadas dentro del plan de seguridad ciudadana, en el mandato del EX- Presidente Dr. Leonel Fernández.
Sin embargo, dichas medidas no surtieron el efecto esperado, pues la delincuencia fue creciendo cada día, al punto que la sociedad ha llegado a tener temor hasta de salir a las calles y en muchos casos a tomar acciones de seguridad de forma personales.
Al asumir la presidencia el Lic. Danilo Medina Sánchez, una de sus preocupaciones es la de garantizar la seguridad a los ciudadanos, con el objetivo de lograr la paz y la tranquilidad que demanda el Pueblo Dominicano.
En este sentido, al ver que la delincuencia sigue en forma creciente, se ve en la obligación de instruir a las autoridades competentes, la implementación de un nuevo plan para detener este mal.
En dicho plan, decidieron apostar el Ejercito Nacional en las calles, pero esto parece ser que no ha intimidado a los delincuentes, y en los últimos días vemos como se han producido hechos delictivos que deben llamar la atención de las autoridades y la población.
Me refiero a las muertes en manos de delincuentes de la segundo Teniente Zuelica Ponciano Solano, el primer teniente Deibi Demorizi Castillo, el segundo teniente, Manuel de Jesús Sosa Jiménez, y otros.
A todo esto yo me pregunto ¿Quién podrá defendernos?
No son las autoridades, pues han fracasado, solo Dios puede salvarnos, solo él es capaz de cambiar los corazones de los mas aguerridos delincuentes, y sacarlos del lago cenagoso a donde han caído, es por eso que cualquier plan debe contar con la aprobación de Dios, para que pueda ser efectivo.
La Biblia dice, en Salmo 127 si Jehová no guardare la ciudad, en vano vela la Guardia.
Por. LIC. LIZARDO PANIAGUA VILASECA, M.A
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