COMUNICADO
En la vida siempre tendremos responsabilidades que nos pondrán en posiciones poco amigables, que se salen de nuestras manos pero no son fijación o posiciones personales. La profesionalidad, el respeto y el amor por el periodismo que compartimos, sobrepasan cualquier mal entendido surgido con nuestro hermano, colega y amigo Gilberto Mateo, a quien admiro desde el primero momento que nos conocimos por los peldaños alcanzados y su superación constante.
Cualquier publicación, difusión que salga desde la oficina para la cual laboramos no son personales, Dios y mis acciones lo demuestran. Cometo la indiscreción de decir que desde que nuestro colega Gilberto Mateo nos pregunta y nos dice lo que podría estar pasado con su caso, en fecha 30 de marzo 2020 vía chat de WhatsApp le pedi autorización para concitar una cita y ayudar a tramitar su caso, así lo hicimos hasta llamar a varias veces a Santo Domingo a diferentes oficinas en busca de una solución a su inconveniente.
Todos los colegas de mi provincia saben mi grado de disposición, en fortalecer la comunicación, crear buenos lazos de amistad y hermandad por el bien de los que ejercemos este oficio y de la población. Asumir responsabilidades en instituciones suelen verse como posiciones particulares porque nos toca servir de vía en el mensaje, pero no es así. Estaré siempre de frente con respeto, entrega, vocación y dedicación en el ejercicio del trabajo y siendo siempre ente de paz dentro de las posiciones de cualquier entidad que nos toque laborar.
Siempre suya, Laura Meran.
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