¿Qué es lo bueno de lo malo?

 

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  Trata de valorar el calor humano de tus allegados y aprecia a quienes tienes. ISTOCK

Por: Ana Mirtha Vargas

SANTO DOMINGO.-¿De qué te sirve resistir el cambio? ¿Cómo puedes transformar este momen­to en algo grandioso para tu vida y el mundo? ¿Qué tal si provocas algo produc­tivo? Las circunstancias ac­tuales nos han sumergi­do en incertidumbre y falta de control, circunstancias opuestas a la seguridad que requerimos, en consecuen­cia, se generan temores, an­siedad, estrés y condicio­nes físicas colaterales que van como efecto dominó. El COVID19 nos ha puesto de rodillas, ha transforma­do nuestros hábitos y for­ma de vida. Nos obliga a te­ner un egoísmo sano: “Yo” mi salud física, emocional y espiritual, también a tener empatía. Valoras el calor humano de tus allegados y aprecias a quienes tienes. Cambian tus valores.

¿Qué es lo bueno de lo malo? Del caos y el dolor  emergen bendiciones. ¡Bús­calas! Resurge con nuevas destrezas. Te invito a mi­rar las circunstancias con los ojos del turista aventu­rero: admira la belleza en lo pequeño donde el resto percibe aburrimiento y ru­tina. Un cambio de actitud podría sorprenderte. La re­sistencia del viento produ­ce que el velero se mueva. Como dice nuestro dilecto amigo, el General Luis Rive­ra Jiménez “Y cómo yo no sé cuándo me va a tocar a mí, esta tarde voy a cantar”. ¡Esa es la actitud!